La tiza inunda las calles, las terrazas de los bares, paradas de autobuses, televisión y por supuesto internet. El "chalk", término inglés que significa tiza, es una moda de las que pegan fuerte y que ha desplazado a todas las fuentes modernas que se venían usando. También me he unido a la tendencia de decorarlo todo con una
tipografía antigua, no podía ser de otra forma, todo lo vinculado con el pasado se muestra elegante, con un hermosura tan distinguida que cuesta encontrarla en la actualidad.
Este baúl, es un baúl infantil, personalizado, un regalo de cumpleaños donde se plasman los gustos, preferencias, y aspectos físicos de un niño de tres años.
Últimamente, las tiendas chinas están incluyendo entre sus productos, objetos en crudo para pintar uno mismo. Compré este pequeño baúl, le quité las asas laterales espantosas, el cierre y bisagras se lacaron en rojo y el fondo del baúl lo pinté en blanco, lo hubiese pintado en negro pero el papel con el que se empapeló por dentro no era demasiado apropiado para hacerlo. Para el acabado final se lijó, enceró y se le dio una ligerísima pátina. Toda la tipografía está pintada a mano, sin plantillas, mucho esfuerzo para un resultado maravilloso. Espero que os guste.
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